“El odio es para muchos un placer invisible donde tristemente, hay personas en este mundo que disfrutan odiando o haciendo daño a los demás sin darse cuenta de que el único daño que están haciendo es así mismos”.

No importa cuando leas esto lo que trato de explicarte es sencillo. Si odias a alguien significa que estás “muerto en vida” tan simple como eso. El odio es para mucho algo normal en sus vidas y creen que sentir odio o rencor por alguien les está ayudando, pero todos sabemos que la realidad es otra totalmente distinta. ¿De qué sirve odiar a alguien por quien es, por su tipo de vida o por los sueños que con esfuerzo ha logrado?. Envidiar u odiar a alguien por ese motivo, significa que como persona careces de personalidad alguna y que la única forma de sentirte bien contigo mismo y tu miserable vida, es criticando la de los demás. Sí, criticando aquellas vidas de personas soñadoras a las que probablemente no sabrás ni un 5% sobre el sacrificio que han tenido que hacer para llegar hasta ahí. Personas, que han vivido cada segundo de su vida luchando por sus sueños día a día sin importar el qué dirán, la opinión de los demás y hasta incluso teniendo que aguantar de sus propios seres queridos: “No lo conseguirás”. 

Pues para tu información sorprendentemente yo soy una de esas personas que está cumpliendo y logrando sus sueños día a día ya tienes un motivo más por el que criticarme o juzgarme, pero hagas lo que hagas, nada ni nadie logrará detenerme. Ya va siendo hora de que la sociedad se dé cuenta de que el odio es una enfermedad y lo creas o no es más grave de lo que te imaginas y te explicaré el por qué. Seguramente te habrá pasado que has sentido algún tipo de rencor u odio por alguien que era o es tu amigo, por algún conocido, hasta incluso, por alguien famoso. Sí, tristemente envidias a una persona famosa por todo lo que tiene, pero sin embargo, tú has decidido no cambiar ni mejorar tu vida en absoluto para al menos conseguir todos esos propósitos de vida que te planteas, pero que tan solo dices: “comienzo el lunes”. Despierta, y deja de pensar como si la ignorancia fuese lo único que se almacenase en tu mente. Deja ya de sentirte frustrado contigo mismo porque no eres como esa persona que tanto odias y permíteme aclararte que lo que sientes no es odio sino envidia porque desearías ser como esa persona en cualquier ámbito de su vida.

 Cuando tengas tiempo, reflexiona sobre cuanto tiempo de tu vida malgastas odiando a los demás(por los motivos que sean) y te darás cuenta de que ese preciado y valioso tiempo nunca, lo recuperarás. Quizás ahora no lo entiendes porque tienes una vida mediadamente estable no tienes ni muchos ni pocos problemas sino los justos y de salud vas bien. Ahora te pregunto: ¿Cuándo tu salud te falle? ¿Qué harás?. El odio no va a salvarte de lo que sea que te pase ni tampoco arrepentirte diciendo una y otra vez: ¿Por qué a mí?. Todo pasa por un motivo y cuando cualquier tipo de enfermedad llame a nuestra puerta créeme, te darás cuenta de lo importante que es saber apreciar cada instante de nuestra vida y disfrutarlo al máximo.

Disfrutaste durante mucho tiempo haciéndole daño a los demás. No te dabas cuenta de que esas personas a las que tanto daño hiciste probablemente, estén pasando por una dura y complicada depresión que repercutirá en un futuro próximo y en el peor de los casos les acompañará toda la vida, pero claro, ese “placer invisible” que sientes al sentirte superior a los demás no te permitía pensar que hubiese pasado si te lo hiciesen a ti. Es tan simple como darnos cuenta de que en un mundo donde criticamos a las personas que son egoístas, hacen daño a los demás(de la manera que sea) o que simplemente disfrutan de sus malas acciones, nos olvidamos de ponernos frente al espejo y preguntarnos quién somos en realidad…

Ni hoy ni en 100 años podrías contestarme a esa pregunta ¿sabes por qué?, porque alguien con un corazón tan roto y un alma tan oscura hace mucho tiempo que se perdió así mismo por completo y probablemente, lleve años tratando de encontrarse a sí mismo tratando de calmar su "ira" odiando a los demás y haciendo daño a personas que no se lo merecen tan solo porque no invirtieron tiempo de su vida en resolver sus problemas y reflexionar sobre su vida y en su lugar, decidieron creerse personas “perfectas” en un mundo lleno de imperfecciones…

No te juzgues por quien eres al fin y al cabo has elegido odiar al mundo que te rodea y no él a ti. Algún día cuando el mundo te “pague” con la misma moneda y se quede con el cambio.

Josep Ramos.