“El reemplazo en el amor es como una moneda de cambio crees que obtienes un beneficio por ser algo nuevo e innovador, pero al final, sabes que en cuestión de tiempo, perderá su valor”.

Existen momentos, en cualquier tipo de relación donde creemos que el reemplazo es la solución y realmente cuando lo piensas fríamente sabes que no lo es. Tratamos de llenar un vacío con otras personas simplemente porque creemos que es la mejor solución. Sin darnos cuenta, hemos dejado de lado nuestra propia vida creyendo así que la solución a nuestros problemas y fracasos amorosos es simplemente reemplazar una persona por otra. Créeme, la solución se llama “vida”. Una vida que debes vivir de la mejor manera posible y de la forma más apasionada que puedas en todo momento. Tu propia vida te dirá que necesitas y que no en tu vida y te aseguro que será la única, que con el tiempo te demostrará que personas deben estar en tu vida y cuáles no. 

Aunque te resulte complejo de entender es más simple de lo que piensas. Cuando amas tu vida amarás el resto de cosas que te sucedan. Podrás dar amor de calidad a las personas que te rodean sin que te resulte un compromiso u obligación. Realmente, te mostrarás tal como eres con esa felicidad plena y absoluta que solo desprendes de manera radiante cuando de verdad sientes que estás haciendo en todo momento lo que te dice tu corazón y no solo tu mente. Actualmente, la gran parte de la sociedad cree que la solución a una mejor calidad de vida amorosa consiste en no permitir todo aquello que nos hace daño. En cierto modo es cierto, pero, ¿Qué ocurre con nuestra actitud en el amor? ¿Deben pagarnos con la misma moneda?. Es por ello que muchas veces, nos miramos a nuestro propio: “espejo de la vida” pero no observamos el reflejo de nuestras acciones en el resto de personas. 

Cada vez, le importa menos a las personas el cómo te sientes. Cada vez es menos importante el dar por alguien a quien realmente quieres de verdad si hagas lo que hagas, nunca será suficiente. El problema ocurre cuando todo nos parece “poco”. Esto es debido a que durante años, hemos ido desgastando nuestras ganas de amar a alguien que no sea a nosotros mismos. Es duro llevar esa filosofía de vida, puesto que nunca seremos felices si pensamos así. Siempre vamos a sufrir por algo en nuestra vida. Siempre seremos esa “hoja” movida por el viento a veces con un destino claro y otras sin rumbo y esto tan solo es parte de la vida. Disfruta de este corto, pero intenso viaje llamado “vida” y deja atrás todo aquello que te hace daño o te preocupa, puesto que no hay mal que dure cien años ni persona que pueda resistirlo te lo aseguro.

Es por ello, que nuestra paciencia en el amor simplemente se “agota” queremos vivir rodeados de problemas sin tan siquiera solucionarlos poco a poco y lo creas o no tarde o temprano, el vaso acaba derramándose por completo. Culpar a nuestros problemas del pasado no te hará sentirte mejor, pero de lo que si puedes estar seguro es de que una mente en paz y tranquilidad hará que veas al mundo que te rodea y a las personas de otra forma. No busques el cariño en cuyas personas su vida sea un absoluto “caos” o simplemente formarás parte de ello. No trates de solucionarle la vida ni tampoco que tengan claros sus sentimientos hacia a ti a todas aquellas personas que ni tan siquiera saben la diferencia entre: amor y capricho. Nuestro corazón elige de quien nos enamoramos, pero nuestra mente es la encargada de poner los límites a lo que sentimos. 

Podrán pasar días, meses hasta incluso años hasta darnos cuenta de que esa persona no es la adecuada en nuestra vida como también, con el tiempo nos daremos cuenta de que el problema principal era nuestro y no de la persona que teníamos a nuestro lado. Si dudas del amor que sientes por alguien te aconsejo que te hagas la siguiente pregunta: ¿Me quiero a mi mismo lo suficiente?. En la mayoría de los casos, la baja autoestima y la falta de amor propio hace que nuestras “inseguridades” en cualquier tipo de relación nos afecte por completo. Probablemente, son más las veces que has discutido con tu pareja por “tonterías” que por algo realmente importante es en esos momentos, cuando debes reflexionar y darte cuenta de que la gran mayoría de problemas en nuestras relaciones son creados por nuestras inseguridades como persona y sobre todo en cómo es nuestra actitud ante dichos problemas.

No es lo mismo tener a tu lado un compañero de viaje que un compañero de vida y si no entiendes la importancia de tener claro esta gran diferencia significa que te queda mucho por aprender aún del amor pero sobre todo de la vida. Un compañero de viaje, es aquella persona con la que vivirás momentos de pasión, romance, aventuras e infinidad de momentos tanto buenos o malos, pero que sabes que esa relación está destinada a acabarse por completo en cualquier momento. 

Comienzan con el mismo destino, pero a medida que pasa el tiempo te das cuenta de que no es el amor de tu vida. Ten bastante claro esto porque son muchas las personas que por “costumbre” pasan años de su vida en una relación de altibajos constantes creyendo que pese a los problemas el tiempo les demuestra que están destinados para quererse eternamente. ¿Eterno? Lo único eterno que nos llevaremos de este mundo son los recuerdos el resto de cosas durarán más o menos tiempo dependiendo de lo que nos hace sentir esa persona.

En cuanto a tener al lado un compañero de vida, de la mano deben ir todos esos sentimientos inexplicables que jamás lograremos entender. Una persona que cae y se levanta contigo las veces que hagan falta porque ambos, sois indestructibles. Una persona que se acuesta cada noche pensando en ti y amanece de la misma manera haciéndote sentir y vivir sensaciones en tu alma y tu corazón que ninguna de las dos entiende….

Un alma gemela no es la que aparece de manera temporal ni de casualidad las almas gemelas las creamos nosotros mismos cuando nos damos cuenta de nuestro verdadero valor…

Creer en ti es importante, pero, no basta con creerlo, sino que debes de aplicarlo día a día.

El mejor intercambio entre dos personas se llama: “Amor y respeto”. Ambos dan amor sin pedir nada a cambio por qué saben, que hacen lo que sienten en todo momento y no lo que es correcto y se debe hacer…

Recuerda algo siempre: El que aguante tus lágrimas y las convierta en sonrisas sin importar el motivo de tu tristeza esa persona es el verdadero amor de tu vida…

Josep Ramos.