“Las piedras y los diamantes no se pulen de la misma manera. Pues exactamente lo mismo, ocurre con el valor de las personas”.

No te culpes, no te juzgues y sobre todo, no pienses que podrías haber hecho las cosas de otra manera. Eres como eres y nunca debes permitir que nada ni nadie, trate de cambiar lo increíble que eres. Lo creas o no, muchas personas son conscientes de que nunca, podrán tener la esencia que tú tienes. Nunca, podrán llegar a sentir el amor que tú sientes por las personas cuando decides darle “todo” aunque cuando regreses, lo hagas en pedazos. y nunca te olvides, de que dice más el que hace y no solo habla sobre algo, que el que tan solo habla mucho, pero no actúa recuérdalo siempre.

Cada día, me doy cuenta de que son más las personas buenas las que sufren que las malas ¿Sabes por qué?, porque realmente entienden lo difícil y lo duro que es que te hagan daño sin merecerlo o que te traten mal simplemente porque no le encuentran el sentido a sus vidas. Si eres consciente de que no estás bien, ¿Qué ganas haciéndole daño a los demás?. Probablemente, si esas personas se hiciesen esa pregunta así mismos antes de hacerle daño a alguien, entenderían muchas cosas de la vida que actualmente aún desconocen. No trates de buscar cariño en personas “vacías” no trates de buscar el amor de alguien que vive su vida con el “corazón roto” y que se niega a amar simplemente porque aún no ha superado a alguien de su pasado. Deja que esas personas sigan viviendo en el pasado, y continua tú tu vida en el presente que es lo que realmente importa. 

Comienza, por conocerte más a ti mismo y te darás cuenta de que, no necesitas a nadie más en tu vida. cuestiónate cada día, si hoy eres una mejor versión de ti mismo o que sin embargo, has empeorado y de así serlo, busca una solución de manera inmediata para que nunca vuelvas a ese “inicio” del que tanto te costó salir. Cada vez que creas que alguien no te valora lo suficiente, huye de ahí esa persona, no es digna de estar en tu vida, puesto que el “brillo” de tu alma hace ya tiempo que les quedó grande y en consecuencia, tan solo tratan de destruirte hasta “quemar” por completo a la persona tan maravillosa que escondes dentro de ti pero qué por desgracia para ellos, no saben que no es la primera vez que resurges de tus cenizas y sigues adelante con tu vida sin importar lo que te cueste volver a ser tú mismo de nuevo.

A veces, no es cuestión de tiempo para conocer nuestro valor sino, de las ganas. Es cuestión de que tanto te quieres a ti mismo y que tanto estás dispuesto a arriesgar en tu vida para lograr grandes cosas. Qué tan altos son tus límites para saber que siempre buscarás la manera de rebasarlos con tal de ser mejor en cualquier aspecto de tu vida. No importa cuál sea tu lucha ni tampoco que tanto confías en ti mismo puesto qué, lo verdaderamente importante es que nunca dejes de luchar por aquello que quieres por y para ti. 

Cuántas más veces "dudes" de ti mismo mejor significa, que sabes que puedes hacerlo mejor de lo que ya lo estás haciendo. La duda, no significa que no seas una persona “segura de ti misma” significa, que antes de volver a cometer el mismo error en algo en la vida, has decidido volver a pensarlo para asegurarte de que tomas la decisión correcta. De ahí, la gran diferencia entre las personas “inteligentes” y las “sabias”. Una persona inteligente, lo es por naturaleza sin más tiene el “don” de adquirir todo tipo de conocimientos casi como un “robot” pero simplemente hacen eso: “almacenan información”. Una persona “sabia” usa todo aquello que ha aprendido a lo largo de los años(tanto lo bueno como lo malo) y lo transforma en conocimientos que hacen, que esa persona no sea alguien “común” sino “extraordinario”.

Por eso, el “valor” de las personas debe medirse por su actitud ante la vida y no solo por su apariencia. Recuerda, puedes aparentar ser "feliz" por fuera, pero sentir que tu “alma” se muere por dentro y para ello, solo existe una “cura” y se llama:” Amor Propio”

Josep Ramos.