“No pierdas tiempo con personas que no te hagan ganar vida”.


De verdad escúchame atentamente: “quiérete”. Te lo digo en serio, ámate tan fuerte como puedas cada maldito segundo de esta corta vida. no pierdas tiempo rodeándote de personas que tan solo son una “tormenta” constante en tu vida. Te aseguro, que no tienen nada bueno que mostrarte ni mucho menos, nada bueno que enseñarte. Cierra los ojos y despierta tu mente y dime exactamente qué es lo que ves. ¿Encuentras paz en tu alma? Si la respuesta es no, sigue buscando aún te queda un largo camino por recorrer. No importa cuantas veces la vida nos ponga a prueba lo que importa, es cuantas de esas “pruebas de vida” hemos superado y cuántas están aún en proceso.

 Aunque te parezca una tontería es importante que le prestes atención a esto cada día de tu vida. ¿Has conseguido superar todo aquello que te frenaba? ¿Sigues siendo tú o por el contrario ya no eres la misma persona por culpa de alguien que no te dejan ser tú libremente?. Si no te haces esas preguntas cada día, créeme, significa que aún te queda mucho por conocerte a ti mismo. La base de todo en la vida es el conocimiento. El propio es sin lugar a dudas el más importante y el que desgraciadamente la mayoría, pasamos por alto. Nos esforzamos tanto en agradarle a los demás que nos olvidamos de agradarnos a nosotros mismos. 

Nos olvidamos de valorarnos como nos merecemos. Olvidamos que nuestra principal prioridad en la vida debemos ser nosotros mismos y que sin ese “amor propio” como “asignatura” principal no llegaremos a nada en la vida te lo aseguro. Son tantas las veces que nos olvidamos de nosotros mismos que en ocasiones me atrevería a decir que muchos de nosotros nos despertamos cada mañana, nos observamos durante unos pocos segundos en el espejo y nos preguntamos: ¿Quién eres?. Resulta duro de procesar lo sé. Pero si lo piensas, sabrás que tengo razón. 

Muchas veces, nos preguntamos cuál es el sentido de nuestra vida. nos preguntamos a nosotros mismos si realmente estamos donde queremos estar o simplemente estamos donde el “conformismo” nos ha colocado. Deberíamos reflexionar un poco más en cómo nos sentimos y hacer algo para cambiar o más bien, mejorar todas aquellas “facetas” de nuestra personalidad que aún nos queda por pulir. Parece una tarea fácil, pero, son tantas las distracciones que aparecen en nuestra vida a diario que en ocasiones, no vemos más allá de lo que nos dicen el resto de personas. 

¿Quieres un consejo? Sé tu propio consejero. equivócate cuántas veces necesites, pero cuando lo hagas, asegúrate de que aprendiste la lección y sigue adelante. Aprende a decir “hola” a personas en tu vida y del mismo modo llegado el momento, aprende a decir “adiós” sin apenas importarte lo que esa persona piense de ti. Créeme, a veces nos “aferramos” a personas por miedo a la “soledad” y con el tiempo nos damos cuenta, de que eran esas personas, las que nos hacían sentirnos “solos” porque su presencia, era como si realmente estuviesen ausentes. Creedme, se vive mucho mejor cuando te das cuenta de que no necesitas a nadie, pero que sí que te necesitas a ti mismo para ser feliz. 

Ojo con esto último que acabo de decir por qué lamentablemente, la sociedad actual, cree con absoluta certeza que para ser feliz, siempre debe ser en compañía de lo contrario, la felicidad no tendría sentido. En cierto modo, es importante tener a alguien en nuestra vida, pero ¿Adivina qué?, la felicidad es tan “fugaz” como la vida y te aseguro, que las personas pueden hacernos felices durante un tiempo, pero para que nuestra felicidad perdure en el tiempo primero, debemos ser felices con nosotros mismos.

Ningún vacío puede llenarse con “amor” si la otra persona se olvidó como sentir. ningún sufrimiento puede curarse con cariño si la otra persona no comprende que el sufrimiento es algo temporal y que tarde o temprano las heridas terminan cicatrizando.

La única la razón por la que la vida es “injusta” es porque sabe de sobra que pase lo que pase, ganará la “partida”.

No malgastes tiempo de vida que no vas a volver a recuperar créeme, cuando comiences a valorar cada segundo de vida, entenderás el por qué no debes permitir que nada ni nadie, te haga desperdiciar ni un solo segundo de tu preciado tiempo…

El tiempo no se compra y pasa igual de deprisa para todos, pero lamentablemente, muchas personas siguen creyendo que la vida es eterna…

Josep Ramos.




Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares