"El momento de mi vida en el que me conociste “falleció” por completo. No te asustes, ahora tan solo soy una mejor versión de mí mismo que progresa con el tiempo"…
Le pregunté tantas veces la vida cuál era la solución para tener una mejor vida y ser mejor persona sin darme cuenta de que yo, era la única solución. Nosotros mismos somos los únicos capaces de hacer que todo lo que pensamos en nuestra mente se convierta en realidad. No es suficiente ser “suficiente” pudiendo ser “extraordinario”. No basta con entender algo sobre la vida, sino que debemos comprenderlo que es lo realmente complicado. Muchas veces no nos damos cuenta de que la “ansiedad” es como ese pensamiento que se repite en nuestra mente una y otra vez. Tratas de poner la mente en blanco, pero fracasas, comenzando a perder el control sobre ti mismo en más de una ocasión.
Lo entiendo créeme, no es fácil mejorar. Sin lugar a dudas no es sencillo entender que a veces debemos hundirnos por completo para entender que solo en situaciones “extremas” lograremos resultados apasionantes. Si algo me enseña la vida a diario es a saber controlar mis emociones. ¿Te has parado a pensar cuántas emociones sientes al mismo tiempo en un solo día?. Ni te imaginas la capacidad de nuestra mente para en cuestión de segundos, pasar de una sonrisa a una lágrima y hasta incluso peor, de entrar en “cólera” casi sin ningún motivo aparente. Todo esto, tiene una explicación y al menos en mi caso, la solución es simple: “Reflexionar”. Si lo creas o no, debemos parar por un segundo lo que estemos haciendo y decirnos a nosotros mismos: ¿Qué ocurre?. Lo creas o no, en ese momento sientes como te comienzas a relajar poco a poco y comienzas a ver un poco de “luz” en ese mundo de “oscuridad” en el que normalmente vives.
Reflexionar es algo de “vital” importancia. Muchos creen, que todo debe dejarse en manos del “tiempo” pero os puedo asegurar, que tener más edad no implica poseer mucha más sabiduría que años atrás os o aseguro. Podrás aprender todo sobre la vida que si no sabes qué hacer con todo lo que has aprendido es lo mismo que nada.
Seguramente, habrás vivido alguna situación en la que sientes que tú eres la única persona que ha progresado de todo su entorno. Comienzas a darte cuenta, de que eres de las pocas personas que sí que ha avanzado y mejorado en su vida y es en esos momentos, cuando tu entorno comienza a interesarse por el “como” lo hiciste. Si me lo preguntan a mí, la respuesta será muy precisa resumida en dos palabras: “amor propio”. Sí, personalmente no importa que tan inteligente seas o que tanto aprendas sobre la vida que nada de lo que hayas aprendido,(tanto lo bueno como lo malo) te servirán en absoluto a no ser, que comiences a entender y procesar todos y cada uno de tus conocimientos.
Recuerda la fortaleza de nuestro corazón no es la misma que la de nuestra mente. Las heridas de nuestro corazón se podrán “reparar” con el tiempo, pero las de nuestra mente, tan solo depende de nosotros mismos y sinceramente, prefiero vivir toda una vida con el corazón “roto” que no tener el control absoluto sobre mi mente.
Obviamente, no puedo controlar lo que pienso ¿Acaso alguien puede? Pero a lo que me refiero es que a medida que aprendemos a controlar nuestras emociones con ello, aprendemos a alejarnos de todo aquello que nos hace daño. Ya no esperas una respuesta a una “mala actitud” tan solo borras de tu mente eso que te ha afectado en ese momento y analizas, borras y actualizas así sin más.
Ahora te estarás preguntando ¿Eso no es tener poca empatía hacia los demás?. Bueno, eso depende a quien se lo preguntes si eres de esas personas que cree que es “necesario” aguantar todo el daño que te hagan las demás personas entonces en ese caso, es probable que carezcas de empatía hacia los demás, pero, prefiero ser “odiado” por tener personalidad que “admirado” por ser “hipócrita” con todo el mundo… Ninguna actitud es mejor o peor, tan solo, es según cuáles sean tus prioridades en la vida así de simple. Si no me acabas de entender, te invito a seguir leyendo atentamente…
Prioridades, como una forma de vida o simplemente, como algo “ocasional”. ¿Qué quiero decir con esto? Bueno, quiero decir que tus prioridades deben formar parte de tu día a día como algo fundamental que siempre haces. Habrá días, en lo que te guste más hacerlo y otros menos, pero bajo ningún concepto, perderás el enfoque y continuarás en línea recta…
Es una forma de ser un poco más “visionarios” y objetivos con nosotros mismos. ¿Hacia dónde se dirige tu vida? ¿Cuáles son tus metas? ¿Qué puedes hacer para mejorar?. Todas estas preguntas son las que debe hacerse tu mente a diario y tú, aplicarle todas las respuestas con esfuerzo y sacrificio diariamente.
El principal problema de la sociedad en este caso es ese que todo o casi todo lo ven como algo: “opcional”. Si obligas a alguien a levantarse a las 6 am todos los días para ir a trabajar o mejor aún, para luchar por sus sueños te aseguro, que solo unos pocos, harán el esfuerzo. Sin embargo, si algo es “opcional” solo dependerá de ti mismo si hacerlo o no. Se podría dividir en dos “bandos” por decirlo de algún modo o más bien, dos tipos de personas. Los que deben y los que quieren.
En mi caso, soy más de esas personas que “deben hacerlo”. No, no siempre estoy motivado y al 100%, pero precisamente en esos días, es cuando más doy todo y más. No importa lo cansado que me sienta ni tampoco, los problemas que tenga en esos momentos, no hay nada más importante que dar todo de nosotros mismos cuando sentimos que no podemos dar ni 1%. Es ahí, donde descubres la verdadera “fuerza interior” que posees dentro de ti. Es en esos momentos cuando te enfrentas a todos y cada uno de tus “no puedo” y los conviertes en: “yo puedo”.
El control de tu vida comenzará cuando comiences a controlar tu mente…
No te reconozco ya no eres la misma persona. Exacto, precisamente de eso se trata de progresar y avanzar y no de limitarse...
Josep Ramos.
👏👏😍🥰❤️👌😘
ResponderEliminar