“Silencios en los que tan solo nuestras sonrisas mantienen una eterna conversación”.
A veces, las palabras desaparecen. No hay comunicación salvo nuestra sonrisa. no hay melodía de ninguna canción salvo que me tranquilice más que sentir esa profunda mira donde puedo sentir, como si lentamente, me acariciases el alma. Es una sensación de paz y tranquilidad que sinceramente, a veces me gustaría no despertarme de un sueño así. ¿Parecía real verdad?, bueno, desafortunadamente aún no he sentido ese “clic” por alguien que me haga sentir como si nunca antes, hubiese conocido la palabra: “dolor”.
Es curioso porque, a medida que pasan los años, aprendes más, a permanecer en "silencio" y a observar mucho más a tu alrededor. Ya no miras lo que sucede sino, que lo “observas”. Comienzas, a prestarle mucho más detalle a todas aquellas cosas que antes, para ti no tenían importancia. Comienzas a encontrarle el sentido a “amarte” a ti mismo porque te has dado cuenta que, el amor siempre comienza por el “propio”. Sin amor propio, es como si no existiese la vida. De verdad, estoy totalmente seguro que de que, de no saber querernos a nosotros mismos nuestra vida, sería “guiada” por decirlo de algún modo por otras personas que muy probablemente, no nos quieran a su lado por mucho tiempo. En realidad, es culpa nuestra por no haber “sanado” nuestras “penas” por decirlo de algún modo a tiempo. Sí, como lo lees la base de toda relación comienza por no permanecer en el mismo “punto” que te encontrabas antes de conocer a esa persona es decir, que todo en tu vida no sea = 0.
Si has dado el paso a conocer a alguien, te felicito. Ahora bien, asegúrate de haber dejado todo lo que te molestaba o afectaba en tu vida a un lado y prepárate y ten la seguridad y confianza necesaria, para mostrarle la mejor de tus sonrisas a algo tan “delicado” como lo es el amor. A mí personalmente, me funciona mucho reflexionar cada noche y “preguntarme” a mí mismo en que situación me encuentro conmigo mismo. Quizás te resulte que estoy “loco” por hablar conmigo, pero ¿Acaso crees que voy contando mis preocupaciones a todo el mundo?. ¿Acaso eso resolvería mis preocupaciones?. Muchos, creen que sí, que lo mejor que puedes hacer es “desahogarte” con alguien para que así esas personas puedan “aconsejarte” de la mejor manera y con ello, hacer que tu vida cambie. Desgraciadamente, todo esto no es más que un error. En mi primer lugar, porque estás dando la oportunidad a esa persona de que “cambies” tu forma de ser, tu forma de sentir, en resumen, tu forma de vivir en general es por ello, que me gusta hablar mucho conmigo mismo para obtener todas y cada una de las respuestas que necesito para afrontar prácticamente todo en la vida y te explicaré el por qué.
Hablando conmigo mismo, sé perfectamente que no me engaño a mí mismo. soy consciente, de que puedo intentar “evadir” esa situación que me preocupa o me hace daño pero tan solo, por un instante porque solo yo, sé toda la verdad. Es aquí, donde aprendí a permanecer en "silencio" en más de una ocasión y creedme, no os podéis imaginar la felicidad tan grande que se siente cuando permaneces unos pocos segundos en silencio y luego comienzas de nuevo, una conversación ya sea, contigo mismo, o con alguien más…
El silencio, me ayudó mucho a saber pararme a reflexionar y entender que hay cosas en la vida, que son así sin más. Hay personas, que simplemente su forma de vivir es a base de mentiras y “auto engañándose” así mismas y oye, son felices por lo tanto, ¿Quién soy yo para juzgar a nadie que es feliz actuando así?. Para llegar a este punto, debes pasar por mucho, créeme. Debes haber conocido a muchísimas personas a lo largo de tu vida tanto amistades, como relaciones de pareja etc. Me costó años de mi vida, entender que realmente si quería ser feliz de verdad debía aprender a “aceptar” a los demás tal como son siempre y cuando, su “actitud” por decirlo de algún modo no afectase a mi día a día de manera constante. ¿Qué quiero decir con esto?, muy sencillo, me refiero a que aprendí “entender” que no todas las personas deben dar lo mismo que doy yo y que no por ello, significa que me “quieran” menos, sino que simplemente, son: “formas distintas de querer”.
Hay amores, que duran unos pocos "capítulos" de tu vida y hay otros, que podrán ser largas “temporadas” pero siempre, quedará ese bonito recuerdo escrito de por vida en tu corazón que es al final, la parte más importante. Lo más importante, no es enamorarse de alguien y ya. Lo más importante es cómo nos enamoramos y por qué lo hacemos. Conozco relaciones que “creen” estar locamente enamorados el uno del otro, pero que en realidad, no va más allá de una atracción sexual os lo aseguro…
¿Tan difícil es ser preciso con lo que sentimos?. Si de verdad quieres saber si es amor lo que sientes por esa persona, te invito a que hagas la prueba del “silencio”. Mantente durante 10,15 segundos aproximadamente, observando fijamente a la otra persona y dime ¿Qué sientes? ¿Qué te trasmite cuando la miras?, ¿Qué emociones te ha hecho sentir en esos pocos segundos?
Si en ese pequeño momento, sientes como esa persona es capaz de hablarle a tu alma y hacer que tu corazón se revolucione por segundos entonces, es amor de lo contrario, tan solo es algo que se le parece pero no amor.
Para mí, el permanecer en silencio frente a la persona que amas y sonreír poco a poco, es sin duda una de las mayores muestras de amor que existe…
Shhh no me interrumpas, ahora es el momento en el que la melodía de tu voz le jura amor eterno a mi corazón….
Josep Ramos.
Comentarios
Publicar un comentario