“A veces vivimos dentro de nuestra propia cárcel donde constantemente, aumentamos la condena cada vez, más y más simplemente por no entender algo tan simple como: “Aprender y Seguir”.

Es más sencillo de lo que imaginas lo que ocurre, que tu constante “rutina” de convertir tus miedos en las peores de tus pesadillas hace que todo en tu vida, sea de color “gris”. Te aseguro que toda esa negatividad que constantemente ves en tu vida no va más allá de tu imaginación, puesto que, sinceramente no tienes por qué preocuparte de tantas cosas a mismo tiempo. Cuando digo que en ocasiones “creamos” nuestra propia “cárcel” es precisamente por eso porque nos condenamos a nosotros mismos simplemente por haber cometido errores en nuestra vida. Te diré algo, ¿Qué es el progreso sin errores?. ¿Qué es la vida sin tiempo?, o peor aún, ¿Qué son los sueños sin propósitos?.

 Todas esas preguntas podrían pasar constantemente por tu cabeza y muy probablemente, nunca podrías darme una respuesta “coherente” porque todo lo que acabo de mencionarte, es simplemente “necesario” en nuestra vida para que así podamos aprender de los errores que hemos cometido y de los que nos quedan por cometer te lo aseguro…

Sé que es difícil, entiendo que hayas vivido muchos años de tu vida “acostumbrado” a que prácticamente otras personas fuesen los que te manifestasen que hacer en cada situación de vida, pero es hora de que eso cambie. Vas a tener que seguir con tu vida te guste o no. vas a tener que afrontar situaciones de vida en las que el “perdón” no será suficiente y te tocará sufrir las consecuencias de tus malas decisiones por tu constante negatividad y tu maldita “impulsividad" que constantemente hace que tomes decisiones equivocadas haciendo daño a mucha gente…

Créeme, esto debe de cambiar. No puedes estar continuamente juzgándote por haber hecho tantas cosas mal si ni tan siquiera te estás dando cuenta a la hora de hacerlas que haces daño a los demás. Si aceptas mi consejo la mejor forma de evitar dañar a lo demás es entender el significado del “daño”. ¿Perdón?. Sí, es algo así como cada vez que sientas que vas a hacerle daño a alguien verbalmente reflexiones una y otra vez todas aquellas veces en las que las personas te han hecho lo mismo he incluso peor. 

Todos esos momentos de angustia y de dolor donde sentías que la otra persona “disfrutaba” haciéndote sufrir porque podías sentir en su mirada esa “frialdad” como si nunca antes hubiese latido su corazón y careciera de sentimientos pues justamente eso, debes pensar antes de hablar o de hacerle daño a alguien solo así entenderás, de que nadie y repito “NADIE” bajo ninguna circunstancia de vida se merece que le hagan sufrir de ninguna manera.

Las personas que hacen sufrir a los demás sin duda alguna, son las que más están sufriendo porque la única forma de calmar su dolor y de “silenciar” a sus inseguridades es a base de hacer sentir peor a otras personas para no sentir, que son las únicas personas que están sufriendo en esos momentos y por si me lo preguntas sí, es lo más cruel que te habrán dicho nunca, pero te aseguro, que hay muchas personas así que simplemente: “camuflan su dolor haciendo daño al resto”…

No permitas que tu mente cree una “cárcel” dentro de ti donde únicamente veas odio y rencor en la vida. donde únicamente seas feliz haciéndole daño a los demás porque te has dado por vencido y es tu soledad la que lentamente te está “matando” nadie, es culpable de que tú no sepas como controlar y sanar todo ese dolor que llevas dentro de ti…

Permítete el lujo de reconocer que sientes que tu alma está perdida por el mundo y que te cuesta encontrar el camino que te haga poder volver a recuperar esa felicidad, que hace tanto tiempo que ya no sientes. 

No le temas a los cambios porque precisamente esos cambios, harán de ti una mejor persona y de mucho más valor y encuentra en ti mismo el verdadero significado de la palabra: “amor”…

Aprende a ser ese “faro” para el resto del mundo y esa “vela” para cada día de oscuridad en tu vida para que así recuerdes, de que no solo iluminas al resto del mundo con la luz de tu alma, sino que al mismo tiempo, creas esa propia luz para sanarte a ti diariamente…

Josep Ramos.