“Invisible en tu vida, pero presente en tu corazón”…


Todos tenemos a personas así en nuestra vida. aunque en ocasiones, cueste reconocerlo, todos queremos ocultar un sentimiento que sentimos por alguien como si no hubiese pasado cuando en realidad, somos conscientes de que lo que no se borra de nuestra mente, mucho menos lo hará de nuestro corazón. Es curioso como hay personas que nos marcan en nuestra vida de tal forma que ya nada vuelve a ser lo mismo. Avanzas y continuas con tu vida, pero tu manera de sentir y de ver a esas nuevas personas que aparecen en tu vida ya no es la misma.

Tratas de ser tu mismo y de encontrar esa misma conexión que tuviste con ese: “amor invisible” del pasado, pero te das cuenta de que nunca, encontramos dos veces a la misma persona ni tan siquiera, en esa  misma persona. Esto, me hace darme cuenta y reflexionar mucho sobre el amor. Lo que para mí es amor es hacer que todo aquello que sientes por alguien y que  no tenga explicación ni tan siquiera, las cosas más evidentes porque aunque no lo creas cada día es como si se volviesen nuevamente a conocer. por todo aquello que aprendes de la otra persona, por esa forma de sentir amar y sobre todo, de demostrarte de que no solo estará ahí cuando necesites derramar cada una de tus lágrimas que no siempre serán por un motivo aparente, pero no importa una de las claves del amor es precisamente eso, estar al lado de la persona que amamos aun cuando no entendamos el motivo por el cual esa persona tienen esos constantes cambios emocionales sin motivo aparente…

Con el tiempo, lo comprendí. entendí, que nunca es suficiente cuando se trata de dar amor a alguien o de recibirlo porque aunque no lo creas, todo lo que comienza siendo una bonita casualidad debe continuar siendo de la misma manera. Con más ganas que al principio, pero manteniendo esa constante intriga donde no estás muy seguro de lo que sientes, pero si de  que te gusta vivir ese tipo de emociones inexplicables que para ti, había “muerto por completo” hace ya mucho tiempo…

Y es que lo entiendo, porque en ocasiones, nos gustaría “perder la memoria por completo” para así no haber vivido ciertas situaciones en nuestra vida que nos han convertido en personas que realmente no somos. Creando una “coraza” que ni entendemos  porque, ha sido el efecto de todas esas veces en las que con amor puro sentimos y con lágrimas nos despedimos y así, en más de una ocasión… 

Yo, como tantas personas han sido testigos de esos amores “fríos” y sin apenas sentimientos que únicamente se mantenían “vivos” porque probablemente, ese amor iba acompañado de una tensión sexual muy fuerte, pero ¿Adivina qué?, cuando el tiempo pasa, es cuando realmente te das cuenta si esa persona es realmente un amor real y permanente en tu vida o simplemente, se trata de una experiencia más de vida…

Mucho cuidado con esto porque en ocasiones, confundimos amor con cariño y luego nos preguntamos una y otra vez el por qué siempre nos ocurre lo mismo. Nos preguntamos como es posible que siempre le encontremos a esa otra persona ese “algo” que necesitamos en nuestra vida y que él/ella carece cuando es probable, que el problema sea nuestro por querer buscar la perfección absoluta cuando somos conscientes de que no existe y no solo eso, sino que todos tenemos defectos y virtudes y cuando hablamos de amor, no se trata de “permitirlo todo” sino de entender y comprender los defectos de la otra persona y enamorarte de ellos…

Al igual que yo, muchas otras personas han tardado años en darse cuenta de todo esto. Han vivido con ese “miedo constante” tratando de buscar explicación a algo que desde el principio ya sabían la respuesta: “no estabas preparado para una relación”. Y sí, aunque suena fácil decirlo es muy difícil admitir que realmente es ese nuestro problema.

No puedes comenzar ningún tipo de relación si estás “divorciado” de ti mismo. Puedes reírte si quieres, pero con el tiempo, entenderás de que llevo razón. No puedes querer a alguien sin previamente aprender a quererte a ti mismo te lo aseguro… No puedes hablar ni sentir con todas tus fuerzas si toda tu energía la has “gastado” en tratar de entender al resto del mundo cuando ni tan siquiera te entiendes a ti mismo créeme, ni en el amor, ni en la vida nada puede seguir una línea recta o más bien una “estabilidad” si emocionalmente estás roto por dentro…

Necesitas sanar para poder crear nuevos sentimientos y nuevas sensaciones en las que te sientas “vivo” y puedas entender la hermosa belleza que esconden personas increíbles que están dispuestas a darlo todo y más por ti recuérdalo.

Ten presente que nadie tiene la culpa ni de tus errores ni de ese “exceso de pasado” que atormenta tu presente, por lo tanto, es hora de comprender, sanar y seguir adelante en busca de ese amor que quizás ha llamado en más de una ocasión a tu puerta, pero que te has negado a abrir las puertas de tu corazón por tenerle miedo al “amor”…

Aunque no lo creas, si es posible tenerle miedo al amor, pero únicamente cuando sientes un vacío tan grande dentro de ti que ya no sabes cómo volver a llenarlo sin salir lastimado… la respuesta a todo esto es simple: “Fluye”. Deja que la vida y el amor te sorprenda(pero de verdad) lucha diariamente contra ti mismo y afronta los cambios que necesita tu vida para que todo ese “amor invisible” que no ves con claridad se convierta en algo real, sincero y sobre todo duradero…

Permítete el derecho a equivocarte una y otra vez, pero no permitas que sean tus miedos los que controlen ese derecho…

Nuestra mente nos demuestra diariamente que lo único que no es real es aquello que no podemos sentir, pero no por no poder sentirlo no significa que eso que estamos viviendo no sea del todo cierto pues, exactamente lo mismo ocurre con el amor no puedes dudar de un sentimiento que a día de hoy es tan “desconocido” únicamente porque no hayas encontrado el amor verdadero…

En la búsqueda de “amor propio” descubrí que si era capaz de quererme a mí mismo era capaz de aprender a querer a los demás sin la necesidad de recibir exactamente lo mismo…

Invisible en tu mente pero permanente en tu corazón…

Josep Ramos.



Comentarios

Entradas populares