“Nacemos enamorados de la vida y moriremos enamorados de la muerte porque ambas, son inevitables”.
Aunque a veces sientas que no, amas tu vida del mismo modo que amarás ese día en el que ya no formes parte de este mundo te lo aseguro. Es curioso porque si lo piensas por un instante, entenderías que hasta incluso en tus peores momentos de vida donde desearías que todo acabase algo así como “apagar la luz de tu vida” y poder sentir ese último latido la realidad es otra totalmente distinta.
Ni en tus peores momentos desearías que tu vida acabase. Créeme, sé perfectamente de lo que hablo y hasta incluso en mis peores momentos no obtuve rechazo hacia la vida, sino todo lo contrario me sentía vivo. Me sentía aún más fuerte y capaz de superar todos y cada uno de mis miedos que trataban de frenarme por la fuerza. Pero resulta, que cuando tu mente es mucho más poderosa y estás preparado para casi cualquier cosa te aseguro, que nada puede detenerte…
El simple hecho de que muchas personas le teman a la muerte es precisamente por no saber aceptar algo que es evidente. Toda vida tiene un comienzo y un final. Puedes vivir toda tu vida temiendo lo inevitable o por el contrario, puedes comenzar a vivir, ver, y sentir, la vida como realmente se merece: “viviéndola”. Para muchos es quizás un tema muy •”tabú” por decirlo de algún modo, pero pienso, que es necesario hablar de la vida y de la muerte con total naturalidad sin que nadie deba alarmarse. Si te fijas lo curioso de ambas es que en ambos casos sufrimos ya sea consciente o inconscientemente, pero lo hacemos todos de igual forma.
En vida, sufrimos y derramamos lágrimas por cosas que en la mayoría de ocasiones no tienen importancia y sí, digo “derramar” porque aunque no lo creas, cuando derramas lágrimas por algo o alguien normalmente, carece de importancia. Es algo así como una situación irrelevante en un “mundo ficticio” que es tan solo generado por nuestra mente para llegar a ese punto de preocupación en nuestra vida que cuando nos damos cuenta, entendemos que ha sido una pérdida de tiempo pero sobre todo, de vida. Por otro lado, cuando “lloramos” es por algo que realmente sentimos en lo más profundo de nuestra alma. Una sensación de dolor y amor casi que simultánea por algo que o bien nos haces felices o nos hace estar tristes así sin más…
Esto es lo que yo denomino como: “conocer nuestras emociones”. Conocer y entender en todo momento, que cada vez que nos sentimos de alguna manera es precisamente por algo que realmente nos afecta y no por algo simple que sabemos que tiene solución…
De verdad os digo a todas esas personas que diariamente “reclaman ayuda” al resto del mundo por vivir en una constante “depresión” que cambien su manera de ver la vida y os aseguro que todo cambiará para bien. No digo con esto que tu sufrimiento no sea real ni que estés exagerando simplemente digo, que el conocerte mucho más a ti mismo te ayudará a poder comprender y valorar cada instante de vida porque nunca sabes cuándo será tu último aliento, por lo tanto, deja de “jugar” a la ruleta rusa con tu vida porque llegará el día en que esa “bala” en forma de vida acabe contigo y en ese momento no habrá marcha atrás…
Ahora bien, mi pregunta a todas esas personas es la siguiente: ¿Están preparados para decirle algún día “adiós” a la vida?. Sé lo que estás pensando ¿Acaso alguien lo está?. Pues sinceramente, yo creo que sí. Soy fiel creyente de que si llegamos a un nivel muy alto de espiritualidad y conocimientos aprenderemos la importancia de entender de que ni la vida, ni las personas, ni el amor, son para siempre y que cuando antes lo aceptes antes comenzarás a ser feliz de eso, no me cabe la menor duda…
Y no, no se trata de que tus emociones sean mayor o menores que las del resto del mundo como para nada importarte sin más, pero simplemente has comprendido que todo principio de vida acaba teniendo un final así de simple… ¿Qué si es justo? Bueno, hablar de lo que es justo o no, cuando en ocasiones nos permitimos el “lujo” de sufrir por personas y cosas que nos quitan tiempo de vida es igual de “absurdo” que cuestionar si la vida ha sido justa o no con nosotros…
La vida y la muerte solo entienden dos idiomas: “Tiempo y Recuerdos”•…
Josep Ramos.
Comentarios
Publicar un comentario