“En plena oscuridad de mis inseguridades”

Entender el camino es entender nuestro propósito. Entender el por qué comenzamos algo aún sabiendo que nadie nos cree, aún sabiendo que estamos destinados a aceptar ese punto en la vida en el que solo nos tenemos a nosotros mismos, en el que todo aquello por lo que sueñas ya no solo forma parte de un simple sueño, sino que es parte de tu vida.

Aprendes a evadirte de lo malo, de todo aquello que simplemente no te aporta nada bueno en la vida y simplemente llega un día en el que ya no esperas por nadie. Ya no esperas ser aceptado por todo el mundo porque siempre, habrá ese “algo” que no le guste a las personas de ti y aunque sí que es cierto que no podemos “gustarle” a todo el mundo de nosotros, depende también si quedarnos o no al lado de personas que simplemente no han sabido apreciar nuestro verdadero valor…

En mi opinión el valor es como la vida, cuánto más valor te des a ti mismo, mucho mejor te irá la vida y te explicaré el por qué. si te valoras lo suficiente, aprendes entiendes, pero sobre todo, comprendes de que no comienzos ni tampoco finales, sino simplemente transcursos de vida que tenemos que, simplemente, vivirlos de la mejor manera posible. Darte valor es hablar contigo mismo y no fallarte. Cuando hablo de “fallarnos” a nosotros mismos, hablo de no tratar de ser otra persona por agradar a alguien de poseer, esa esencia y esa carisma vital en nuestra vida para que te muestres tal como eres en todo momento, sin necesidad de sentir que no “encajas” o no te sientes como deberías sentirte…

Al menos en mi caso personal, aprendí de mis inseguridades que continuarían atormentando mi vida día tras día a menos, que aprendiese a dominarlas. El poder del “control” es lo que me ha salvado en numerosas ocasiones cuando lo daba todo por perdido… es difícil controlarlo, puesto que siempre que tratas de controlar algo de tu vida aparece nuestro “querido” ego y nos arrebata por completo ese supuesto “control” que tenemos sobre algo. es algo así como si la vida nos pusiese a prueba cada vez que tratamos de controlar nuestro desorden y tratar de poner todo nuestro “caos” en orden… es como si la vida nos preguntase ¿Realmente tienes el control o solo lo finges por tratar de evitar el dolor y la angustia que no te deja vivir?...

La de veces que me he replanteado tantas cosas en mi vida que, sin duda alguna, ese tipo de “dudas” o inseguridades(llámalo como quieras) han sido las culpables de que nunca me rinda…No es que sea una persona sin sentimientos ni que no me afecten las cosas(al contrario) es más, me atrevería a decir que en el vacío de mi soledad se encuentra la mayor de las tristezas cada vez que reflexiono sobre todo aquello que me preocupa de verdad. 

En persona quizás no de esa apariencia es probable, que pueda dar la impresión de que todo va bien, de ser “irrompible” hasta incluso en ocasiones, me han acusado de mi falta de empatía o sensibilidad con las personas pero no dejes que mi “falso ego” te engañe es tan solo una de mis tantas “corazas” que utilizo para que nada pueda dañarme o al menos, no lo suficiente como para derrumbarme por completo… y por si te lo preguntas, sí, soy de esas personas que cuando doy algo, lo doy todo, soy pasional y sobre todo muy pero que muy intenso y me gusta disfrutar todo al máximo y trato de que las demás personas puedan sentir lo mismo que yo…

Tristemente, me he encontrado con la pared en frente muchas veces porque cuando las personas ven a alguien con tantos sentimientos a flor de piel, pese a estar roto por dentro, puede llegar a “asustar” y como consecuencia esas personas se queden por el camino y dejen de formar parte de mi vida pero, ¿Qué puedo decir? Así es la vida, unas personas van y otras vienen, pero pase lo que pase mi vida seguirá a delante y ni hoy, ni mañana, ni nunca me detendré por nadie…

Si llegase el día en el que dejase de ser yo mismo y me rindiese por completo, entonces ahí descubrirías una parte de mí que muy pocas personas han podido conocer porque como ya sabes, mostrar todo aquello que nos hace daño es doloroso y mucho y no todo el mundo está preparado para saber manejar una situación así…

Si por dolor me alejo, por amor a mí mismo permanezco, pero en ambos casos, priorizo siempre sentirme bien conmigo mismo y nunca derrumbarme…

Pese a la presión constante que pueda llegar a sentir, pese a todos esos comentarios que a diario atormentan mi vida y sobre todo mi mente, por lo que hago o dejo de hacer ¿Honestamente? No me afecta en absoluto, pues, es mi día a día diario, en ocasiones sentirme querido y en otras desplazado ¿Acaso no os ha pasado nunca algo así?... El problema está en cuando no aprendes de ello, sino que simplemente dejas que tu vida pase así sin más. 

Años atrás, los comentarios de personas que no me conocían lo suficiente me los tomaba muy “en serio” de verdad que sí es más, hasta llegaba a enfadarme con esas personas cuando en realidad la “guerra” era contra mi mente. Era débil y sobre todo incapaz de ver el lado “bueno” de lo que esas personas me decían. Mi mente solo procesaba que esas personas eran los equivocados y que yo tenía la razón hasta que un día después de tanta frustración, enfados, ira, decidí sentarme durante horas y reflexionar sobre mi mismo. sobre mi vida, sobre si lo que estaba haciendo era lo correcto o si podía hacer algo para mejorar mi calidad de vida…

Desde ese día, todo cambió, aprendí el “por qué” sin entender el “como” porque por más que en mi mente quisiera buscarle una explicación a prácticamente todo entendí que no era necesario. Aprendí a tener una visión un poco más amplia sobre cómo podían llegar a sentirse las personas a diario con sus vidas y si realmente eran 100% felices. La respuesta obvia es que “NO” pero no por ello, dejaban de sonreír, de querer ni de sentir, entonces comprendí que yo podía hacer exactamente lo mismo. vivir como si nada me afectase aún sabiendo que me tocará vivir momentos que me harán mucho daño pero no importaba, era parte de la vida…

El reflejo de mis inseguridades no es más que el reflejo de la “salud” de mi alma.

Josep Ramos.



Comentarios

Entradas populares