“Huir de algo que tienes en la mente es como decirle a tu corazón que deje de latir literalmente imposible”
La de veces que comienzo de “0” en mi vida. Ni te imaginas la de veces que siento que vuelvo a empezar una y otra vez. Es como si la vida, estuviese constantemente poniéndome a prueba para comprobar si en algún momento pienso rendirme. Desgraciadamente, para ella eso, no va a suceder nunca. Soy de esas personas que siempre encuentra una solución a prácticamente todo. Tengo un nivel de positivismo igual de grande que mi ego y te aseguro que cuando se juntan es el mejor estado de equilibrio que jamás haya existido.
Al menos en mi caso particular soy de los que cree que si algo no tiene solución es porque no lo intentaste lo suficiente o porque simplemente permitiste que tus problemas acabasen contigo. Fuiste “víctima” de que tu mente controlase todas y cada una de tus emociones es por ello, que cada vez que tienes algún problema fracasas y estás durante días buscando una solución… Precisamente ese, es el error de muchas personas querer solucionar todo en ese mismo instante(cuánto se equivocan las personas que actúan así).
Hay veces, que tenemos que extraernos de todo lo que nos daña, de todo aquello que nos preocupa y nos inquieta y darnos unos días de reflexión para poder actuar con claridad para que me entiendas, es algo así como cuando estás constantemente pendiente de algo durante todo el día y nada cambia. Debes ser consciente de que hay momentos y problemas en nuestra vida que no van a ser solventados en cuestión de horas, ni de días, y hasta incluso meses, porque todo lo que hacemos y de la forma que lo hacemos es lo que realmente con el tiempo nos dará una solución concreta y sobre todo, “acertada” a todo aquello que nos preocupa…
Esto, no me convierte en una persona más inteligente que el resto de personas de mi entorno, pero sí, alguien que tiene claro al 100% como actuar antes las adversidades porque lo creas o no, lo que mata a las personas no son los problemas ni las enfermedades, sino su actitud ante todo lo que les sucede. De todo hacen un maldito drama, de todo tratamos de agravar una situación que en realidad es más sencilla de solucionar de lo que crees, pero hay muchas personas que literalmente “viven” con una venda en los ojos que no les deja ver más allá de la realidad…
Creando momentos y situaciones incómodas que no existen salvo en su mente. Tratando de buscar ayuda en personas que ni tan siquiera han vivido o están viviendo lo que tú en ese momento. Porque como ya sabes, el miedo pesa y cuando sientes que ya no tienes escapatoria y que todo te sale mal en la vida cualquier “opción” es buena y no, en ese momento de mayor desesperación, frustración y sobre todo, “euforia” debemos reflexionar y despejar nuestra mente el tiempo que necesitemos para poder tomar la mejor decisión.
Nunca te olvides que un error se comete por desconocimiento, pero cometer el mismo error dos veces es por pura voluntad porque nadie repite dos veces el mismo error si la primera vez aprendió y comprendió que se había equivocado…
Es por ello, que las excusas de la vida se convierten o en aprendizaje que nos haces cambiar nuestra manera de ver el mundo o que, simplemente, culpamos al mundo de su actitud por todo lo que nos sucede. A nadie, le gusta reconocer que todo lo que le está pasando en su vida es una consecuencia de lo que dice, de lo que hace, pero sobre todo, de cómo piensa.
Son muchas las grandes mentes que se han visto envueltas en un fracaso prácticamente “eterno” por el pequeño detalle de no darle la importancia a lo que es verdaderamente importante. A saber pedir perdón cuando debemos pedirlo, a no dejar que nuestro orgullo y rencor cambie nuestra manera de pensar bajo ningún concepto y sobre todo( y no por ello menos importante) a saber valorar a las personas tal y como son, independientemente de si esa persona te agrada o no. En algún momento de tu vida, dejarás de ser una persona “ignorante” y habrás llegado a esa “etapa adulta” de tu vida, donde deberás tomar conciencia sobre todas y cada una de tus decisiones porque cada decisión cuenta.
Ya no habrá tiempo para preguntar aquellos “por qué” que te preguntabas años atrás y te tocará descubrir y sobre todo ser “amigo” de los “cómo hacerlo” ya no estamos en ese momento de arrepentirnos de lo vivido, sino de crear otro nivel de conciencia que nos ayude a definir la persona que somos realmente. Más allá de todo pronóstico y dejando a un lado esos sentimientos que te hacen daño, comienza a crear ese infinito de posibilidades en tu vida donde lo único importante es aprender de todo aquello que vives.
Sin preguntas, sin respuestas y sobre todo si prejuicios, simplemente un estado auténtico y natural de ti mismo que te defina el resto de tu vida…
Lo sé, lo fácil es rendirse, pero es que tú no eres de esa clase de personas…
El lamento no es una opción.
Creaste el hábito de aprender a vivir y sin darte cuenta, te convertiste en la mejor versión de ti mismo…
Un poco de oscuridad no le hace daño a una mente perdida que necesita encontrar su luz.
Josep Ramos.
Comentarios
Publicar un comentario