“Fracaso, una palabra que para muchos les hace sentir pánico y para otros, tranquilidad… Para entender lo segundo tienes que haber entendido el por qué, el fracaso es algo bueno en tu vida.”


Vivimos y moriremos a base de fracasos y es que solo así, se construyen las mejores situaciones de nuestra vida. Lamento decirte que si no fracasas es que no estás haciendo algo y bien y del mismo modo, si tras cada fracaso no aprendes nada sobre tus errores, significa que nuevamente vas a cometer el mismo error una y otra vez. Muchos te dirán que no pasa nada, que es bueno equivocarse una y otra vez hasta aprender de verdad, pero, resulta que te olvidas de lo principal que sin darte cuenta estás perdiendo: “tiempo de vida”.

Es por ello, que inculco a todas las personas a equivocarse, pero siendo conscientes de que el tiempo es limitado. Hay errores que no puedes cometer dos veces porque, de lo contrario, no vas a volver a tener otra oportunidad. Y que uno de los principales problemas de nuestra sociedad es que dejan las cosas pasar como si nada importase como si por “arte de magia” todo fuese a solucionarse por su cuenta y no, la vida no funciona así. En la vida, tienes dos opciones o te acostumbras a tus fracasos o aprendes de ellos y lo conviertes en victorias de ti, depende que es más importante para ti si el arrepentimiento por cometer el mismo error una y otra vez o cuando decidas dejarlo todo a un lado y abandonar…

Tristemente, esto último pasa la mayoría de las veces que abandonamos cuando estamos a punto de lograrlo. No nos gusta sentirnos “incómodos” y que algo sea “difícil” porque nos sentimos inferiores ante esas adversidades hasta tal punto que despertamos a nuestro “ego” que es el culpable(en la mayoría de ocasiones) de que abandonemos cada cosa que hacemos.

Te diré algo si realmente quieres conocer a alguien de verdad, asegúrate de preguntarle, no por las veces que ha fracasado sino por aquellas que ha dejado de intentarlo. Te sorprendería ver a tanta gente con tanto talento y tantas capacidades para hacer 1001 cosas en la vida y que, sin embargo, su mente les derrotó por completo y ahora su vida gira en torno a la monotonía, el conformismo y sobre todo, el reproche constante hacia lo demás…

Del mismo modo que debemos entender el fracaso también cuando somos unos fracasados y probablemente, tú seas uno de ellos. Te gustarán más o menos mis palabras pero sabes que tengo razón. No vales nada y no precisamente porque no seas alguien de valor y con grandísimas cualidades en la vida que es evidente que las tienes, pero, nada que suceda en silencio puede expresarse como una realidad en nuestra vida. O actúas y vas con todo a por tus sueños o te tocará ver cómo se cumplen los sueños de otras personas, te lo aseguro…

La vida va a maltratarte, utilizarte y hasta incluso manipularte si se lo permites te lo aseguro. No busques que sea algo justo y que no te haga daño porque lo hará y aún más si ve que eres una persona débil cuyas metas únicamente se encuentran en tu pensamiento. Si no puedes hacer de tus sueños una realidad en tu vida, entenderás el porqué de todas y cada una de tus inseguridades… con el tiempo habrás hecho de ti una persona nefasta y débil que tan solo encuentra consuelo en el apoyo de otras personas que constantemente te dirán que hacer, pero que nunca has prestado atención a sus palabras…

Es normal que las palabras se las lleve el viento si los “hechos” en la vida de muchas personas es prácticamente inexistente…

Vivimos aferrados a una realidad que solo existe en nuestra mente llena de sueño rotos, odio y mucha pero que mucha hipocresía. El no saber controlar este tipo de pensamientos es lo que nos hace fracasar una y otra vez sin saber el motivo… pasa el tiempo, y te das cuenta de que la ignorancia de tus pensamientos es ahora la realidad de tu vida…

Con lo fácil que hubiese sido sacrificarlo todo sin importar las consecuencias.

Las derrotas que más duelen son las que dejan de suceder porque equivocarnos es y será siempre, la mayor lección de vida que nos haga mantener el equilibrio en nuestra vida y nunca perder el control...

Por ego lo perdiste todo, y por el que dirán nunca recuperaste lo perdido, y ahora, sin embargo, te encuentras como un barco a la deriva, sin rumbo ni lugar que poco a poco se va hundiendo…

Ahogado en las penas del fracaso, entendí que el éxito era mi única salida…

Josep Ramos.



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